Desde el inicio de la gestión de la Dirección de Políticas de Géneros y Diversidades del Ministerio de Transporte se comenzó a recopilar distintos indicadores con perspectiva de género acerca de cómo se organizan internamente las distintas áreas de transporte, estas son: organismos descentralizados, empresas de jurisdicción nacional, como también de las distintas provincias del territorio nacional. La información comprende datos sobre antigüedades en el trabajo, nivel de estudio, jerarquía salarial por tipo de trabajo (administrativo, operativo y jerárquico), todos segregados por mujeres, varones y otras identidades.
¿Por qué es importante conocer las condiciones laborales desde la perspectiva de género? Distintos estudios dan cuenta que las mujeres tienen una menor participación laboral y menor remuneración en tareas similares a los varones. Esto responde a que sobre las mujeres recaen mayores responsabilidades respecto del cuidado de las y los hijos y mayor dedicación a realizar tareas domésticas con búsqueda de empleos compatibles con las actividades familiares. También sucede que las condiciones de trabajo las expulsan del circuito laboral. Como consecuencia, estas situaciones pueden limitar el ingreso de las mujeres a sectores masculinizados, como también dificultar el acceso a puestos más cercanos al poder de decisión teniendo menor participación en los empleos técnicos.
En Argentina, datos del BID en 2014, dicen que la participación femenina en todo el sector transporte era de tan solo un 9%. Este dato es tomado como base desde el “Plan Estratégico para la incorporación de la perspectiva de género en el ámbito de la competencia del Ministerio de Transporte 2020-2023” desde donde, en parte, se quiere conocer con más profundidad las situaciones laborales tanto de mujeres, varones y otras diversidades impulsado por el eje de trabajo “Participación laboral”, el cual busca aumentar la participación de las mujeres en el ámbito del transporte. Paralelamente, otro eje de trabajo es la “Planificación” que promueve el compendio y sistematización de datos oficiales con perspectiva de género, los cuales no existían previo a la consolidación de la Dirección.
Ambos ejes de trabajo (ampliación de la participación femenina y búsqueda de datos estandarizados) son el marco de acción del relevamiento de indicadores laborales con perspectiva de género, desde donde se persigue reconocer la situación laboral actual de las mujeres y diversidades, para posteriormente equiparar condiciones, promover igualdad de oportunidades para el desarrollo profesional basados en el talento, la idoneidad y la dedicación personal de cada individuo.